domingo, 23 de abril de 2017

Francia, Hora Cero


Los franceses votan hoy en elecciones presidenciales. Vale la pena repasar las posiciones de cada uno de los cuatro candidatos con más intención de votos (ver tabla de arriba). La nota que sigue es de Albert Jiménez García para La Vanguardia de Barcelona:


Título: Elecciones francesas: Las cuatro Francias que prometen los favoritos al Elíseo

Epígrafe: De la ultraderecha de Le Pen a la extrema izquierda de Mélenchon, estos son los puntos clave de los principales aspirantes a la presidencia francesa

Texto: El pueblo francés busca sustituto para su presidente, François Hollande, y este domingo está llamado a las urnas para dejar la elección en cosa de dos. Para esta primera vuelta todas las encuestas dan unos resultados muy ajustados entre los cuatro principales candidatos. La ultraderechista Marine Le Pen y el liberal Emmanuel Macron se mantienen en las primeras posiciones pero en las últimas semanas de campaña ha disminuido su intención de voto. En tercera posición, sube posiciones el conservador François Fillon después de los escándalos de corrupción que le salpicaron en campaña que lo tambalearon y en cuarto lugar se cuela en la lucha por el Elíseo el candidato que más ha crecido en intención de voto en el último mes, el poscomunista Jean Luc Mélenchon.

Las diferencias entre los cuatro son mínimas, un empate técnico insólito en la historia reciente de las elecciones francesas. El número de indecisos es muy elevado y cualquier cambio de última hora o impacto social como el ataque terrorista en los Campos Elíseos de París puede llevar a unos u otros a la segunda vuelta electoral. Lo que será inamovible hasta las elecciones son sus programas electorales presentados de forma general a continuación.


Emmanuel Macron

Emmanuel Macron, de 39 años, es el más joven de los cuatro y no tiene experiencia en procesos electorales pero lidera las encuestas con un 23% en intención de voto. Hace un año decidió abandonar la cartera de Economía en el gobierno socialista de Hollande para presentarse a las elecciones con su propio movimiento político, ¡En Marcha!.

En economía, apuesta por abaratar los costes de contratación para las empresas, suprimir 120.000 plazas de funcionarios y reducir el gasto público en 60.000 millones. En inmigración, Macron tiene como prioridad mejorar la integración y mantener la tradición francesa de ser un país hospitalario. Europeísta convencido, cree que el futuro de Francia pasa por estar dentro de una Unión Europea (UE) que necesita reforzarse en sus múltiples dimensiones y libertades. En el plano de la religión mantiene su defensa por un Estado laico y asegura que cerrará los centros de culto donde se haga apología del terrorismo.


Marine Le Pen

Marine Le Pen es la representante de la ultraderecha francesa desde 2011, cuando sustituyó a su padre, Jean-Marie Le Pen. La candidata del Frente Nacional llega fuerte a las elecciones presidenciales. Su partido fue el más votado en las elecciones europeas de 2014 y en las departamentales y regionales de 2015. Criticada por muchos de racista, homófoba y antisemita, lo cierto es que su discurso ultranacionalista ha caldado hondo entre los franceses y los sondeos la situan segunda en la carrera electoral con el 22,5% de la intención de voto. Si las apretadas encuestas no fallan, ella y Macron serían los dos candidatos que pasarían a la segunda vuelta del 7 de mayo.

En materia económica, Le Pen aboga por el proteccionismo comercial y el restablecimiento de la moneda propia porque no comulga con los acuerdos de libre comercios y las normativas europeas. En empleo pretende subir el salario mínimo, adelantar la edad de jubilación a los 60 años y garantizar la sanidad pública al 100% de los franceses. Su política exterior poco tiene que ver con la UE. Le Pen quiere a Francia fuera de la OTAN y de la UE para recuperar soberanía monetaria, económica y territorial. En su estrategia de seguridad considera elemental que Francia recupere el control de las fronteras intracomunitarias y acabar así con la inmigración incontrolada.


François Fillon

François Fillon, a sus 63 años, está ante su última oportunidad real de seguir liderando Los Republicanos y ser presidente de Francia. El experimentado ex primer ministro iniciaba la carrera electoral en las primeras posiciones pero dos imputaciones por malversación de bienes públicos y apropiación indebida de bienes, lo hicieron desinflarse. Aún así, sus opciones de entrar en la segunda vuelta se mantienen ya que sigue de cerca a Macron y Le Pen con el 19,5% en intención de voto.

El conservador de centro-derecha apuesta por la liberalización de las fuerzas económicas de Francia para eximirlas de normas y cargas excesivas. Pretende ahorrar 100.000 millones en cinco años, suprimir medio millón de plazas del sector público y aumentar la jornada laboral de 35 horas semanales. El liberalismo económico de Fillon se conjuga con un marcado conservadurismo social que se identifica con los valores católicos aunque con una férrea defensa del laicismo estatal. Fillon quiere reducir los inmigrantes con nacionalidad francesa a aquellos “claramente integrados”. En relación con Europa, apuesta por la renovación de la gobernabilidad y la integración en la UE.


Jean-Luc Mélenchon

Después de toda una vida ligada al Partido Socialista, Jean-Luc Mélenchon se presenta a las elecciones como una alternativa radical de izquierdas. Con el nombre de ¡Francia Insumisa!, ha presentado un movimiento que agrupa el socialismo democrático y el antiliberalismo económico. Las encuestas los sitúan en cuarta posición con el 19% de la intención de voto, muy cerca de Fillon.

Para cumplir con su ideario de redistribución social de la riqueza, Mélenchon quiere destinar 100.000 millones de euros “a grandesproyectos de interés nacional” financiado con fuertes alzas impositivas a los más ricos y a los bancos. Es partidario de renacionalizar sectores con carácter estratégico y quiere crear 3,5 millones de puestos de trabajo. En inmigración se postula en contra de la restricciones sobre la llegada de personas, el asilo y la nacionalidad. Sobre la UE, se declara soberanista euroescéptico y es partidario de que Francia se libere de los Tratados Europeos. Ecologista reconocido, el izquierdista apuesta fuerte por las energías renovables y la lucha contra el cambio climático.

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