Por un lado, una tremenda serie de bombazos en Reyhanli, territorio turco muy próximo a la frontera noroeste de Siria. Muchos muertos, centenares de heridos (véase: http://www.lewrockwell.com/blog/lewrw/archives/137438.html). Rápida reacción turca acusando a Siria de los hechos. Sin embargo, nadie se lo cree: Reyhanli es un pueblo de mayoría alawita que apoya mayoritariamente al presidente sirio. En segundo lugar, se reportan ataques con cohetes, por parte del "Ejército Sirio Libre", a la población shiita de Hermel, en el norte de El Líbano (véase: http://www.minnpost.com/christian-science-monitor/2013/04/syrian-rebels-intensify-rocket-attacks-lebanon).
En síntesis: internacionalización del conflicto sirio. Todo muy burdo, sí, pero claramente indicativo de la magnitud del pánico que está atacando a la curiosa Santa Alianza de estos tiempos: NATO + Israel + Turquía + Arabia Saudita + Qatar. Alcanzará para justificar una invasión a Siria por parte de esta especie de Armada Brancaleone? Habrá que ver. Puede ser un globo de ensayo más, puede ser el comienzo de algo más groso, puede que el tiro les salga por la culata, como suele ocurrir últimamente.
Dos detalles no menores: primero, a esta altura de los acontecimientos, Siria cuenta con uno de los ejércitos de tierra más preparados del mundo para operaciones tanto defensivas como ofensivas sobre el terreno, para operaciones regulares e irregulares, armado hasta los dientes por Irán y Rusia, con una inteligencia militar preparada y sofisticada, con cuadros leales y motivados (los desertores hace tiempo que se fueron o están muertos), con misiles defensivos instalados y listos para operar (los famosos S-300 hace tiempo que fueron instalados), con una flota rusa que está a días de agrandarse dramáticamente. Hace dos años que el ejército sirio está en operaciones: una preparación formidable. Posiblemente haya signos de desgaste, claro, pero los tipos huelen la victoria y la moral es alta.
Segundo, se está consolidando un eje en Medio Oriente: Hezbollá (Líbano) + Siria + Irak + Irán, para felicidad de Rusia (sobre todo de Gazprom) y de China, y espanto de la Armada Brancaleone. Sí, el eslabón más flojo es Irak, sin dudas. Mucho depende de cómo se resuelva el problema kurdo. No sabemos gran cosa del tema, así que mejor callar. Una cosa parece garantizada: llega el turno de sudar frío para los monarcas sauditas y qataríes. Nervios aquí y allá. Hace pocos días salió eyectado el ministro de defensa de Arabia Saudita, y fuerte candidato al trono, el príncipe Khaled bin Sultan.
Más informaciones para este boletín.
No hay comentarios:
Publicar un comentario